domingo, agosto 16, 2009
ARTÍCULO. “LOS PODERES DE LA MENTE” *** La extraña historia de Adolfo Torres.
ARTÍCULO. “LOS PODERES DE LA MENTE”
*** La extraña historia de Adolfo Torres.
POR PROF. DR.MERVY ENRIQUE GONZALEZ FUENMAYOR.
MARACAIBO.ESTADO ZULIA.REPÚBLICA DE VENEZUELA .AMÉRICA DEL SUR.
REDACTADA Y TRASLADA A LA RED DOMINGO 16 AGOSTO 2009.
La mente es un campo en el que los razonamientos no tienen límites, sus juicios a veces suelen parecer irracionales, imposibles, utópicos y sin oportunidad de concreción. Todavía en este siglo 21 y en este tercer milenio hay personas que creen que el cerebro domina en forma absoluta el organismo del ser humano. Está comprobado por las investigaciones efectuadas por los especialistas en el tema, que el cerebro ejerce su dominio sobre el cuerpo humano, es decir el cerebro le ordena a cada uno de nuestros órganos las condiciones, formas y términos en los cuales debe funcionar. No obstante la mente controla al cerebro y en consecuencia a todo el cuerpo humano. En algunas otras oportunidades he escrito ciertas reflexiones sobre el tema de la mente, de su funcionamiento y del dominio que cada uno de nosotros puede ejercer sobre ella. Hace casi 30 años ingresé en un programa internacional sobre la mente y su control. Se trataba de una organización que desarrollaba cursos de diferentes niveles en más de 24 países. El participante ingresaba y terminaba el curso básico que se dictaba en el transcurso de una semana con unas 60 horas de exposiciones, ejercicios de tipo psíquico y otros aspectos. La gran ventaja consiste o consistía, en que se pagaba y se realizaba el curso básico, y ya no había que pagar ningún emolumento por todos los sucesivos cursos básicos que se podrían dictar en el futuro, los que realizaban cada quince días.. Otra característica de suma importancia era que cada curso básico lo dictaba una persona o facilitador, distinto al primer facilitador que te dictó tu primer curso básico. Y como la organización estaba integrada por un número considerable de instructores, en cada curso básico la posibilidad de aprender cosas novedosas, realmente era tangible y posible. De ello se deduce que el participante siempre estaba al día con los avances de las diferentes disciplinas que estudian la mente humana y sus aplicaciones. Con el tiempo el participante-miembro de la organización, podía acceder mediante el pago de un emolumento, a la realización del curso superior y luego se le ofrecía la oportunidad para ser instructores o facilitadores, para lo cual se le suministraba una bibliografía de mas de doscientos textos especializados y una estadía de aprendizaje en algún lugar de los Estados Unidos de Norteamérica. Todo esto lo traigo referencia, para soportar las aseveraciones y afirmaciones de que desde hace tiempo he venido sosteniendo ,respecto de la importancia de conocer a profundidad el funcionamiento de nuestra mente, para aprovechar mejor nuestras capacidades, destrezas, y habilidades.. No se me podrá reprochar la circunstancia de ser un católico cristiano practicante y que esta condición sea prohibitiva para hurgar en los caminos de la ciencia. Ya Juan Pablo Segundo puso de manifiesto, a través de la encíclica Fides et ratio ( Fe y razón ) que la ciencia y la religión o fe ,no se contradicen y que antes por el contrario se complementan.. De manera que es de una gran utilidad teórica y práctica el conocimiento de la mente humana y su poder, fuerza y auxilio en la consecución de cualquier cosa que nosotros nos propongamos.. El siguiente ejemplo, que es clásico en estos casos, nos pone de manifiesto de ese poder mental. Practique este ejercicio. Imagine usted un limón de color verde intenso, trate de imaginar su, olor, imagine que lo toca y lo aprieta dejando salir de él parte de sumo. Imagine ahora que toma un cuchillo y corta el limón en dos mitades. Concentre su atención en su color intensamente verde, imagine su olor y el acido de su jugo. Ahora visualice el momento en el que se lleva a su boca una de las dos mitades de ese limón y lo exprime en ella, concéntrese en el sabor ácido de ese limón, de ese jugo y de cómo se desplaza por su lengua, por sus dientes, por el velo del paladar, por sus labios etc... Estoy seguro que en la medida en que desarrollaba cada una de las partes de este ejercicio, sus glándulas salivares comenzaron a generar excesiva saliva, tal y como, si el limón o la mitad que usted se llevó a su boca, habría estado en ese sitio y que usted lo hubiese saboreado.. Realmente el limón no tuvo existencia material. Ese limón únicamente estuvo en su mente, pero el cerebro que no distingue entre realidad o fantasía, recibió la orden de la mente de ordenar a los órganos debidos , generar la saliva suficiente para neutralizar o enervar el ácido producido por el limón. Este ejercicio lo he expuesto en muchísimas oportunidades, para explicar de manera muy simple sencilla la poderosa fuerza de la mente humana.
Comparto con mis lectores la siguiente información:
Los poderes de la mente
PRIMER PODER: Soy una maravilla. Tengo fe en mí mismo y en mis capacidades y posibilidades. Aunque se presenten limitaciones, yo, sólo yo, puedo cambiar la manera de interpretar lo que me sucede.
SEGUNDO PODER: Soy lo que pienso. La forma en que pienso afecta de manera directa a mi salud física, psíquica y emocional.
TERCER PODER: Repaso mental. Aprendo de una forma de pensar positiva, atenta, reflexiva y consciente que dará como fruto nuevos hábitos y rutinas optimistas y persistentes.
CUARTO PODER: Reafirmación. Compruebo y estoy convencido de que me he reinventado. Tomo consciencia del nuevo ser en que me estoy convirtiendo día a día.
QUINTO PODER: Autocontrol. Estoy al mando de mi vida. Acepto con alegría la responsabilidad de mis actuaciones y sus consecuencias.
SEXTO PODER: Me siento creador de felicidad. Intento serlo para los demás, con lo cual, también lo soy para mí.
SÉPTIMO PODER: Me siento parte de un todo. De la energía universal e infinita”.(Autor, Bernabé Tierno. Psicólogo, pedagogo y escritor. Publicado por Dikesi | Servicios de Formación y Bi)
LA EXTRAÑA HISTORIA DE ADOLFO TORRES
Adolfo Torres es uno de esos raros escritores que práctica lo que escribe, dentro de su obra aparece un libro de consulta obligatoria: LA LLAVE DE LA VIDA Y DEL ÉXITO COMO APROVECHAR LOS ILIMITADOS PODERES DE LA MENTE). Por ejemplo: en junio de 1926 tuvo un horrible accidente. El automóvil que manejaba se estrelló contra una enorme roca en uno de los caminos del estado de Wisconsin, en los Estados Unidos. Cuando otros automovilistas lo sacaron, media hora mas tarde, de entre las ruinas de su automóvil, todavía no había recobrado el sentido, y así fue llevado al sanatorio mas cercano. Allí los doctores encontraron que, a mas de una profunda herida en el cuello que por sí sola por poco le cuesta la vida, de dos heridas en la cara, de un hombre dislocado y siete heridas en el cuerpo, la rodilla izquierda estaba rota en cuatro pedazos.
Los sabios doctores movieron tristemente la cabeza. Aquél hombre nunca podría andar de nuevo sin la ayuda de muletas, y no podría dejar el lecho antes de seis meses. Grande fue la sorpresa de los doctores cuando al día siguiente lo encontraron manejando la máquina de escribir con la única mano que podía mover, y dando al mismo tiempo instrucciones a su secretaria. Al entrar, el herido los recibió con una pregunta: ¿Cuándo podría hacer uso del otro brazo? Era muy difícil manejar la máquina de escribir con una sola mano.
–Amigo mío –exclamó un anciano doctor–, ¿No comprende usted la gravedad de su estado? Y le repitió el diagnóstico de la noche anterior.
–Doctor –dijo el herido después de un momento de silencio–. Mi herida mas grave es la de la rodilla. ¿cuánto tiempo necesitan esos huesos, según la ciencia para unirse de nuevo y formar otra vez un hueso sólido y resistente?
–será imposible –replicó el doctor– llevar a cabo la operación necesaria antes de dos semanas, puesto que los tejidos están ahora en muy mal estado. Después de la operación, como el hueso de la rodilla está separado de todos los demás y necesita absorber su nutrición por medio de los tejidos, necesitará un mínimo de seis semanas y un máximo de quince semanas para solidificarse de nuevo. Pero no podrá usted levantarse antes de seis meses, y ahora necesita usted tranquilidad y reposo completos.
–Estamos a 11 de junio –murmuró el herido–. Doctor, me levantaré a fines de agosto; y no crea usted que me voy a resignar a usar muletas toda mi vida o a la pereza durante dos meses.
–¡Imposible! –replicó el doctor–. En cuanto a su trabajo, sea como usted lo desea, pero juega usted una partida muy peligrosa.
Los doctores salieron, y el herido siguió trabajando tranquilamente.
Dos semanas después la operación se llevó a cabo. Al abrir la rodilla, los doctores encontraron que un trozo de hueso había perdido toda su vitalidad, y que tenía que ser extraído. Aquello confirmó su opinión: el herido nunca se restablecerá por completo.
Pero antes de que el mes de agosto terminara, el herido dejó el sanatorio, ayudándose con un par de muletas; y dos semanas mas tarde podía andar sin ayuda de ninguna naturaleza.
–¡Un milagro de cirugía! –dijeron los doctores, asombrados a su pesar. Pero pocos días más tarde un eminente especialista de Chicago, famoso por su saber, movió la cabeza:
–Imposible –dijo–. No hay cirujano que pueda lograr eso. Debe su curación a su MENTE.
La MENTE –dice Adolfo Torres–, tiene dominio completo sobre la materia. Y cuando la necesidad lo obligó a probar esa verdad tan profunda y hermosa, lo probó triunfalmente.
Este libro, tan espléndido, es sólo un reflejo de la vida del Autor, una vida que avanza en línea recta, sin vacilaciones ni temores, hacia el triunfo.
ADOLFO TORRES ESCRIBIÓ LA SIGUIENTE REFLEXION, QUE ESTA GARGADA DE UNA GRAN ENSEÑANZA:
“Para pensar grandes pensamientos tenemos que ser héroes tan bien como idealistas. Sólo cuando un hombre ha trabajado solo –cuando un hombre a sentido en su derredor un golfo negro de soledad.. y, en su esperanza y desesperación, ha confiado en su voluntad inamovible– entonces, y sólo entonces ha triunfado. Solo así puede ganar el goce secreto y aislado del pensador, que sabe que, mucho después de que él esté muerto y olvidado, hombres que ni siquiera han oído su nombre, avanzarán al ritmo de sus pensamientos “.(ADOLFO TORRES)
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